Colonias Municipales: se dictan talleres de lengua de señas argentina
La comunicación accesible para todas las personas es uno de los ejes que se plantean en las ocho sedes de Colonias Municipales de verano a las que asisten cerca de 4000 vecinos y vecinas de la capital provincial. Una instructora brinda a infancias, adolescencias, juventudes y adultos, las herramientas básicas necesarias para contactarse con sus pares.
En el marco de las distintas actividades que se brindan durante el desarrollo de las Colonias Municipales de verano en las ocho sedes disponibles en la ciudad de Santa Fe, se dictan talleres de lengua de señas argentina (LSA). La iniciativa, destinada a todos los colonos, sin importar la edad, consiste en un taller con instructoras sordas que brindan los conocimientos básicos para comunicarse con personas que presentan alguna discapacidad auditiva.
De este modo, tanto a niños y niñas como a adolescentes, jóvenes y adultos se les enseña el abecedario y algunas palabras comunes. El objetivo es que tomen contacto, muchos por primera vez, con la LSA y puedan comunicarse.
La secretaria de Integración y Economía Social municipal, Ayelén Dutruel destacó la importancia de estos talleres que se organizan cada año. Del mismo modo, relató que antes del inicio de las colonias se realizó una capacitación para todos los profesores y profesoras, como así también para las y los instructores que acompañan a cada uno de los grupos.
“Decidimos armar el esquema de capacitaciones y acercamiento a la lengua de señas para las personas que participan de estos espacios, porque nos parece importante que en cualquier ámbito puedan integrarse, vincularse y convivir”, manifestó Dutruel.
En el caso particular de la lengua de señas, la secretaria argumentó que “pensamos a la discapacidad como la necesidad de integrarnos. Todos somos diferentes pero estos espacios nos vuelven iguales”, sumó.
Teniendo en cuenta que los talleres se imparten en todas las Colonias Municipales, la funcionaria mencionó que “con los adultos mayores tuvimos una gran recepción, a punto tal que pensamos en nuevas instancias para profundizar lo aprendido y mejorar esta necesidad de igualar a todos”.
Para cerrar, Dutruel dijo: “Esto demuestra que no hay edad y tampoco hay mejor contexto que este porque nos recreamos, compartimos, aprovechamos el verano y también aprendemos algo que nos sirve para la vida cotidiana en general”. Por último, expresó que las capacitaciones continuarán durante todo el período de colonias municipales, cada una de ellas adaptadas a las distintas edades pero sin dejar de lado lo lúdico.
Para todas las edades
En cada una de las colonias, la instructora sorda Ivana Nardi, tiene a su cargo explicar a los asistentes, cuáles son las herramientas básicas para comunicarse con una persona sorda. Después les entrega el abecedario en papel y, entre todos, van repasando letra por letra; para el cierre, cada uno forma su nombre.
En el caso de la colonia de adultos mayores que se concreta en el predio de Piedras Blancas, sobre la Costanera Este, los asistentes no ocultaron el interés que les generó el tema y pidieron aprender palabras clave como gracias, hola y permiso, entre otras.
Nardi calificó a la experiencia como muy enriquecedora. “Me hizo acordar mucho a mi abuela, cuando le enseñaba lengua de señas. A todos les digo lo mismo: no hay edad para aprender y siempre hay una primera vez para todo”, aseveró. Por otra parte, se mostró sorprendida por la rapidez con que las y los adultos ponen en práctica los conocimientos adquiridos en sus clases. “No me lo esperaba”, dijo contenta y sorprendida.
“Les enseñé en lengua de señas el abecedario para que puedan aprender lo básico y decir su nombre. Después, cada uno puede profundizar los conocimientos. Me llamó la atención que muchos me preguntaron dónde podían seguir aprendiendo”, expresó la instructora.